El té de cúrcuma y jengibre para controlar la diabetes, ayuda en la digestión, aumenta la inmunidad, mejora la cognición y previene el cáncer
Los impresionantes beneficios del té de cúrcuma y jengibre incluyen eliminar la inflamación, aumentar la capacidad cognitiva, prevenir el cáncer, fortalecer el sistema inmune y aliviar el malestar gastrointestinal. También ayuda a proteger el corazón, regula la diabetes, alivia el dolor, contrarresta la depresión y mejora la calidad de la piel.
¿Qué es el té de cúrcuma y jengibre?
El té de jengibre y cúrcuma se elabora remojando raíz de jengibre y polvo de cúrcuma en la misma bebida. El jengibre se conoce como Zingiber officinale, mientras que la cúrcuma lleva el nombre científico Curcuma longa, y ambos son ampliamente utilizados individualmente por sus efectos nutricionales y medicinales. Estas dos poderosas hierbas también están ampliamente disponibles y se han investigado mucho debido a su popularidad mundial.
Beneficios del té de jengibre de cúrcuma
Previene el cáncer
La cúrcuma y el jengibre se han sometido a un intenso escrutinio por su papel en la prevención del cáncer. Se ha demostrado que el jengibre previene y ralentiza la progresión de múltiples tipos de cáncer, particularmente aquellos que afectan el sistema gastrointestinal. La curcumina, por otro lado, es un potente compuesto antioxidante que puede reducir el estrés oxidativo y la actividad de radicales libres en todo el cuerpo, lo que reduce las posibilidades de mutación celular.
Aumenta la inmunidad
El té de cúrcuma y jengibre cuenta con una serie de cualidades antimicrobianas, antibacterianas, antifúngicas y antisépticas que lo convierten en una excelente ayuda para el sistema inmunológico. Si sufre de inmunidad débil y parece tener un resfriado todo el tiempo, este té de hierbas puede ser su solución. Además, para la tos, los resfriados y la congestión, una combinación de estos poderosos ingredientes ayuda a acelerar la curación y eliminar las infecciones subyacentes.
Protege la salud del corazón
Numerosos estudios han encontrado que tanto los extractos de jengibre como la cúrcuma tienen el poder de reducir los niveles de colesterol, principalmente colesterol LDL. LDL es en gran parte responsable de la deposición de placa en las arterias y los vasos sanguíneos, que puede aumentar la aterosclerosis y aumentar el riesgo de ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Mejora la Cognición
La naturaleza estimulante del jengibre es bien conocida, y la combinación única de antioxidantes presentes en este té puede ayudar a estimular la actividad neuronal, aumentar el enfoque y reducir la deposición de la placa beta-amiloide, que puede conducir a la enfermedad de Alzheimer y la demencia. El jengibre también ofrece efectos antiinflamatorios en el tejido cerebral, lo que puede reducir el estrés oxidativo en esa área.
Propiedades analgésicas
La curcumina y el gingerol, los dos ingredientes activos más notables en este té, tienen propiedades analgésicas, lo que significa que pueden aliviar el dolor en todo el cuerpo. Esto se suma a sus propiedades antiinflamatorias, que pueden ayudar a aliviar el dolor en las articulaciones y otras molestias en los músculos y tejidos del cuerpo.
Ayudas en la digestión
El jengibre posee fuertes propiedades antiinflamatorias que ayudan a calmar el estómago, reducir las náuseas y promover la digestión saludable. Puede ayudar a estimular el movimiento peristáltico y eliminar los calambres y la hinchazón, que también pueden eliminar los síntomas del estreñimiento. El té de cúrcuma y jengibre también puede ayudar a tratar el síndrome del intestino irritable (SII), la colitis ulcerosa, la enfermedad por reflujo ácido e incluso úlceras estomacales.
Maneja la Diabetes
Las capacidades de regulación del azúcar en la sangre del jengibre y la cúrcuma son bien conocidas, por lo que, en combinación, son incluso más eficaces para controlar los síntomas de la diabetes. Al mantener equilibrados los niveles de glucosa e insulina, el té de jengibre y cúrcuma evita los picos y las caídas peligrosas en el azúcar en la sangre que pueden ser desastrosas para los diabéticos o aquellos en alto riesgo de desarrollar diabetes.
Protección de la piel
La cúrcuma en este té de hierbas a menudo se ha utilizado para tratar afecciones de la piel, particularmente acné y problemas inflamatorios como la psoriasis y el eccema. El gingerol en el té de cúrcuma y jengibre también es un excelente compuesto antibacteriano y antioxidante que protege la piel de las infecciones, al tiempo que estimula el crecimiento de nuevas células y previene los signos del envejecimiento, como arrugas e imperfecciones.